December 31, 2006

El Mirto

No tuve cuidado al elegir uno en especial. En el vivero le pedí al jardinero que me vendiera un mirto. Dudé en referirme a la planta como myrtus, tal vez el señor sabía más de plantas de lo que creía y me hubiera entendido de las dos formas. Descarté la idea cuando me señaló un área en dónde abundaban las de ese género. Me conformé con seleccionar la de la orilla y pagar el importe.

El día no era el mejor. El calor aumentaba con el paso del tiempo, al punto de sofocar a aquellas almas víctimas de jornadas laborales al aire libre. Yo no acostumbro a trabajar fuera, no porque no lo quisiera. Hace un año me ofrecieron un empleo de albañil y lo hubiera aceptado. El que me contrataba terminó con la frase: estamos en contacto, pero el contacto se perdió ese día. No recibí telegrama o mensaje alguno. Me parece que me vio débil para asumir la labor de un constructor. Por eso no trabajo al aire libre, por falta de oportunidad.

Aquella vez tuve que hacerlo. La idea de sembrar el mirto me ilusionaba más antes de comenzar la acción. Al inclinarme al nivel del suelo para preparar la tierra mis ganas se redujeron. Comencé a fastidiarme. Metodológicamente seguí cavando aunque hubiera podido dejar la actividad; me daba igual así que seguí. El calor aumentaba y de mi frente caían incesantes gotas de sudor.

Aún así yo podría continuar de la misma manera, pero ella apareció. Se paró a unos dos metros de mi ubicación y comenzó a verme. Parecía más cansada que yo. No le hablé, el calor me abrumaba. Ella murmuraba la ineficiencia de mi trabajo, pero yo no alcancé a oirla. No quería escucharla. Seguía refunfuñando y yo estaba empapado en sudor. Apresuré la actividad para terminar en cuanto antes.

Al levantarme, la miré fijamente y ella también lo hizo. No había odio, ni amor; era un sentimiento intermedio que aburría. Se largó y busqué un vaso de agua para refrescarme. Fue una actitud egoísta, el mirto también tenía sed. Si hubiera compartido el agua tal vez no hubiera muerto.

December 26, 2006

"El Angelus" de Millet escrito por Dalí



Los enunciados pueden ser verídicos, verdaderos o incoherentes. Pueden carecer de verdad o corrección gramatical. Como sean, el lenguaje es un producto de un razonammiento.


La primera vez que Dalí observó "El Angelus" de Millet, entró en una paranoia. Se alejó y volvió a repetir la operación varias veces. ¿Qué era lo que sucedía? Cada vez que se acercaba al cuadro algo contruía en su percepción una crisis, inquietud que estaba lejos de la admiración artística.


En su afán de descubrirlo, consiguió permiso para realizar una radiografía al cuadro y encontraron que en el boceto o en las marcas que se quedan debajo del óleo estaba la tumba de un niño entre ambos personajes del retrato.


Dudo si el resultado de la radiografía haya tranquilizado o aumentado su desesperación, lo cierto esque la intuición tenía (después) una causa lógica su ahora llamado "método-paranoico-crítico" abre puertas al misterio de saber no racionalizado.


December 24, 2006

Ana María y su conciencia

No tengo nada en contra de la sociedad, sin embargo soy distinta y no me molesta serlo. Para cualquiera parecería que llevo una vida normal; tengo un trabajo, departamento y no visto con atuendos extrabagantes. Según mi jefe, la vida que tengo es muy insípida , para mí es suficiente.

Si algo me da problemas es madrugar. Odio tener que levantarme temprano pero hay algo que detesto en mayor grado.
- "¡Maloliente!, ¡largo!"
Antes que despertarme a las 6, está ese perro. En él se centra mi odio. El perro llegó aquí por accidente. Hay una ventana rota en el cuarto de atrás y entró por ahí. Debería haberla mandado a arreglar porque no es el único animal que se ha metido a la casa. Sin embargo sólamente él ha tomado el departamento como su hogar; hogar y no casa porque cuida de él a pesar de mis insultos. Me recibe con gran alegría y eso me da lástima. Lo odio.

- "¡Maloliente!, ¡largo!"

También odio mi trabajo, pero no tanto como al can. Me fastidia tener que hacerle plática a los ciudadanos. Que yo recuerde nunca hice trato con la Compañía para seguirles la corriente. Son conversaciones insulsas. "¿Qué calor hace?", "Hay mucha gente ¿verdad?", "¿Cómo pueden trabajar bajo estas presiones?" Todas las preguntas tienen respuesta en el mismo emisor, son inútiles. Si estoy de buenas contesto con monosílabos pero a veces me aburre y sólo los miro con una cara de enfado para que dejen de conversar.

Me limito a realizar mi trabajo, conseguir víveres y no desgastrme ejercitándome de más. Me limito a vivir como quiero.

-"¡Maloliente!, ¡Largo!"

December 23, 2006

El manco



Ayer le pedí a mi papá que me comprara un canario. Él dijo: no. ¡Cuánto deseaba tener un canario! Entonces salí a buscar un pájaro en la ciudad. Caminé tres cuadras y encontré a uno pidiendo limosna. Fue muy emocionante que el animal buscara refugio y yo se lo pudiera –y quería- dárselo. Lo llevé a mi casa y lo intenté meter en la jaula, pero era muy grande y no entraba. Eso no me importó mucho, lo que me preocupaba era que se escapara así que le corté sus alas que eran muy largas. El canario gritó y mi papá corrió para ver qué pasaba. Él se enojó mucho porque me había dicho muchas veces que no quería que metiera limosneros en la casa; traté de explicarle, pero él no entendió que era un canario.

Por discutir con mi progenitor el pájaro huyó, salió corriendo. No se me ocurrió cortarle las patas. No es justo. Aunque pude conseguir mi canario, se escapó y ya no tengo mascota. Sólo quedaron sus alas cortadas, las puse en la jaula como recuerdo hasta que vuelva a tener otro igual.

December 22, 2006

La Casa Azul

Si pudiera elegir un lugar para pasar el resto de mis días, sin duda lo haría en la casa azul (por supuesto quitando las características del DF). El estilo mexicano que guardan las paredes, traen memorias de un mexico del cual, la mayoría de los vivientes no fueron testigos pero sí formamos parte de la historia.



La puerta de la casa azul, te permite la entrada a la vida de los Kahlo; por lo menos la de Frida y Guillermo y por supuesto rastos de Rivera. El jardín aún conserva la riqueza de las flores mexicanas y los muebles están llenos de secretos decimonónicos. Parte importante de las vivencias de Frida se dieron ahí, en donde hoy la gente tiene la oportunidad de realizar un viaje por el tiempo y sentirse parte de ella.

http://www.baxtion.com/mx/la_casa_azul.htm

December 12, 2006

Futuro- Presente-Pasado


La división del tiempo puede comprenderse de dos maneras. A mi criterio sería a. E. y d.E. La introducción de Einstein de manera profunda al micromundo, nos deja a un lado como el centro de la actividad y abre muchas preguntas entre las cuales yo destaco la del tiempo.

Es interesante pensar que todo lo que "vamos a vivir" en realidad ya lo vivimos, como un película en reversa; cortada en fragmentos regresivos y al vivirlos, somos cómplices de olvidarlos, aún no entiendo hasta qué magnitud.

De esta intriga Carpentier lo lleva a las letras: "Viaje a la Semilla"